Invitada por la Embajada de México en El Salvador y la OFES, Rosy Arango ofrece un concierto tan emotivo como mágico.
emociones el pasado martes 12 de agosto, cuando la Embajadora de la Música Mexicana, Rosy Arango, ofreció el concierto Alma Mexicana, que fortaleció los lazos culturales entre México y El Salvador.
La noche comenzó con una ovación que anunciaba lo especial del momento. Rosy, acompañada por los 40 músicos que conforman la prestigiosa Orquesta Filarmónica de El Salvador, OFES, dirigida y fundada por la maestra Alejandra Funes Bustamante, logró crear una atmósfera única que hermanó aún más a ambas naciones.
El repertorio seleccionado fue un viaje musical por el alma latinoamericana. «La Malagueña», «Serenata huasteca», «Sones de ida y vuelta», «Tango número dos» y «Luz de luna», entre otros temas reconocidos, resonaron en cada rincón del histórico recinto, despertando nostalgias y emociones en el público presente.
«Estos temas mexicanos han acompañado a los latinoamericanos por mucho tiempo», comentó la maestra Funes Bustamante, quien destacó la importancia cultural de estas piezas que trascienden fronteras y generaciones.
La organización del evento estuvo a cargo del Embajador, Ricardo Cantú Garza, a través de la Embajada de México en El Salvador, así como de la OFES, quienes sumaron esfuerzos para demostrar, que la música es un lenguaje universal que une corazones y culturas. El concierto no solo fue un éxito artístico, sino también un testimonio vivo de la hermandad que existe entre México y El Salvador.
El Teatro Nacional, testigo de grandes momentos en la historia cultural salvadoreña, añadió una página más a su legado con esta velada que quedará grabada en la memoria de quienes tuvieron la fortuna de presenciarla.