Las Huesudas de cartón

 

Introducción

En México existen diferentes formas de expresión culturales, llamados artesanías o arte popular. Una de estas formas artísticas es la cartonería, cuyo origen podemos remontarlo a la Nueva España. 

Los frailes se valieron de distintas formas para evangelizar a los indígenas, por ejemplo, con piñatas o la quema de Judas. Aunque para estos momentos no se utilizaba la misma técnica que hoy en día.

 

Cartonería

La cartonería como la conocemos hoy en día comenzó a finales del siglo XIX y consiste en crear figuras con una estructura metálica o de carrizo y posteriormente se empapela utilizando papel periódico.

Entre los distintos tipos de cartonería podemos encontrar alebrijes, mojigangas, juguetes, figuras de animales como caballitos, máscaras (algunas para carnavales), y por supuesto calaveras catrinas; aprovechando que ya se acercan las fechas de recibir a nuestros difuntos, vamos a hablar sobre estas bellas calaquitas de cartonería.

 

Calaveras de cartón

El culto a la muerte es algo que podemos rastrear y heredamos de las culturas mesoamericanas. Durante la Nueva España se sincretizaron muchas de las ideas católicas con las prehispánicas; el culto a las calaveras fue una de las tradiciones mexicas que se quedó. 

En el siglo XIX se consolidó la imagen de la huesuda como un símbolo nacional. Más allá de la catrina de Posadas, posteriormente retomada y completada por Rivera, la calaca flaca siempre ha estado presente; es para nosotros los mexicanos un símbolo de identidad nacional.

En día de muertos veos distintas formas de representarla: en alfeñiques, en barro, en papel picado, y por supuesto en cartonería. Los maestros cartoneros crean magníficos esqueletos, ya sean pequeños o de grandes dimensiones. Algunas de las calaveras pueden representar a alguien en específico, o bien se crean las típicas catrinas y catrines.

Las catrinas y los catrines son muy particulares, pues en el caso de las damas, siempre se viste con un suntuoso vestido ampón de principios del siglo XX, además de su indumentaria tradicional, un elegante sombrero, estola y sombrilla, como toda una mujer elegante de la época porfiriana. Mientras que los catrines también representan a los caballeros de este tiempo, con sus trajes refinados y sus sombreros de copa alta, además de sus típicos bigotes enroscados.

Las calaveras les permiten a los artesanos crear y representar prácticamente cualquier aspecto de la riqueza cultural de nuestro país, en todas las épocas y en todas las regiones.

 

 

Fotografías de Pablo Emmanuel Salazar.